El dictamen de la contraloría efectuado el 16 de junio fue la última gota que rebalsó el vaso, ya que logró definitivamente que los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres hayan sido sepultados por culpa de un minoritario grupo de conservadores.
Esto se remonta al año 2008 donde un fallo en contra de la píldora del día después por parte del Tribunal Constitucional, sería el punto de partida para un sin número de sucesos clasistas.
Esta sentencia fue categórica, la píldora se sacaría de todos los sistemas públicos del país. La discriminación era y será abismante, ya que las mujeres de escasos recursos no podrán acceder al fármaco porque 9 personas lo prohibieron, estos son los integrantes del Tribunal Constitucional.
A pesar que el futuro se veía totalmente desolador, las agrupaciones feministas del país se reunieron para trabajar y lograr que la autonomía de los cuerpos de las mujeres. Fue así como se llegó a la conclusión que el “famoso” fallo tenía unos vacíos. Estos eran… que la píldora sí se podía entregar en los consultorios, porque son organismos autónomos donde las Municipalidades tienen incidencias sobre él, entonces, la tarea se transformaría en conquistar el apoyo de los ediles.
A su vez, la sentencia del Tribunal Constitucional tampoco se pronunciaba por el actuar de las ONG´S, este medio también sería una de las vías para combatir la discriminación y las fuentes de poder que inciden sobre nuestros cuerpos, ya que las organizaciones también podían repartir el fármaco sin problemas.
Pero estos sacaron ronchas a un grupo de políticos cartuchos, es por esto, que se reunieron en su cúpula de poder y fraguaron un nuevo dictamen. Es por esto, que la contraloría sentencio la última posibilidad, decir NO a la entrega de la PAE en los consultorios de salud municipalizados y las organizaciones no gubernamentales.
Las acciones de estos “célibes” políticos son francamente asquerosas. ¿Cómo pretenden que una mujer pobre se llene de bebes? Primero, en 1989 derogan la ley de aborto terapéutico, luego en 1996 la jerarquía de la iglesia Católica elimina las JOCAS, después en el 2003 se genera controversia por la entrega de preservativos en 17 playas de la quinta región y ahora el fallo de la contraloría.
Esto es un atentando a la autonomía de las mujeres pobres, claro, porque son estas chilenas las que no pueden pagar una borto, comprar un condón o una PAE. En cambio, sus hijitas o esposas fácilmente acceden a estos medios porque sus recursos y poder se lo permiten.
Fucault tenía razón al mencionar que el Gobierno quiere tener el control de los cuerpos de los seres humanos. Lamentablemente hoy se está logrando, ya que un fallo no tiene relación alguna con salvaguardar la vida, esto es pura demagogia porque sólo quieren tener el privilegio de decirnos cuándo, cómo y qué hacer.
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